Art. de Tittle Tattle

U.V.S.
Durante una deliciosa noche de la primavera del 83, Mae y yo asistimos a un concierto en Viena. Como de costumbre, fuimos invitadas a la recepción posterior. Diversión a lo grande, mientras nuestras copas eran llenadas una y otra vez; era el boom del gin-tonic y las sustancias en el wc! Por suerte mi (en ese entonces) primer marido estaba en misión diplomática y no nos molestó en absoluto.
En plena velada, se nos acercó una distinguidísima mujer, acompañada por un apuesto joven. Calculamos que ella tendría unos 30 años. Él, quizás 20. Se presentó como Uta von Schlommitwein, y pronto estábamos las tres enfrascadas en animada conversación. Su acompañante, por su parte, se llamó al oportuno silencio.
Uta resultó ser un personaje fascinante y sus anécdotas se remontaban a tiempos muy lejanos. ¡Su edad superaba por mucho a la que habíamos imaginado!
Sin embargo, tuve un dejo de temor durante todo el tiempo que ella estuvo con nosotras. Luego acordamos con Mae en que, efectivamente, daba la impresión de estar envuelta en un halo oscuro y perturbador. Una estela de fantasmas la seguía... la protegía? La acechaba?
Hace ya más de 20 años de aquella noche; después de aquel evento nunca más tuvimos noticias de ella. Hasta hace unos meses, cuando recibí una carta firmada por ella pidiendo asesoramiento sobre Arte Latinoamericano, ya que estaba interesada en realizar algunas compras. No imagino cómo conoció mi paradero, ya que en aquel entonces, Mae y yo residíamos en Suecia. Además, la misiva estaba colmada de matices extraños y perturbadores.
Claro que nosotras también tenemos nuestras conexiones y nos dedicamos con ahínco a hacer una profunda investigación sobre Frau von Schlommitwein. Pronto averiguamos algunas cuestiones sobre su oscuro pasado: Austríaca de excelente posición económica, perteneciente a una rica familia judía, fue tomada por sorpresa por los avatares de la Segunda Guerra. Pero Uta, adiestrada en el arte de la supervivencia, y dotada de una belleza sobrenatural, supo cómo mantenerse a flote. Luego de delatar a familiares directos en busca de asilo político, aumentó desproporcionadamente sus riquezas otorgando sus "favores" a altos oficiales del ejército nazi. Ahora lo recuerdo; en el ágape de Viena dijo algo así como...


U.V.S. said

Poco después de 1945 se perdió su rastro, pero increíblemente, supimos que en el final del milenio pasado, estuvo alojada por "conocidos" en la mismísima Córdoba, en La Cumbrecita. No sabemos por cuánto se prolongó su estadía aquí, pero admito que me corrió un escalofrío en la espalda al saber que la tuvimos tan cerca.
Respondí amablemente su carta, deseando no saber más nada de ella. Contrariando mis deseos,hace unos pocos días, mi teléfono sonó. Discutíamos con Mae el dressing code de un evento. Frau von Schlommitwein se anunció con voz ronca y fatigada. La comunicación era entrecortada y con mucha interferencia. Por lo que sabemos, pordría haber estado en cualquier parte. Entonces... la compra de obras era una excusa para comunicarse con nosotras? Acaso una vida de excesos la había arrastrado al borde del abismo? . Por lo visto, necesitaba compartir algo. Mae, inspiradísima, tuvo la genial idea: "ENTREVISTÉMOSLA AHORA MISMO!". Grabamos la conversación y expondremos sus secretos más aberrantes.

En pocas horas... su testimonio.

U.V.S.

publicado por Viveka Lindht-Strassberg a la hora 5:45 PM
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4 Comments:

Anónimo said...

A pesar de pertenecer a una clase y status que aborrezco (me evocan una tía harpía y careta), la prosa del blog me parece muy entretenida. Espero la entrevista.
Lunita psicótica
miércoles, marzo 07, 2007 9:24:00 PM
Mae Zetterling said...

Oh Viv! Lo hiciste! Recreaste esos momentos a la perfección!
Lunita Psicótica... gracias?
jueves, marzo 08, 2007 1:27:00 PM
A TIP said...

LEAVE ON A HIGH NOTE.
viernes, marzo 09, 2007 2:32:00 PM
Anónimo said...

que genial!!!!!!! chicas las amo!!!!!!! no veo las horas de leer la entrevista!!!!!
viernes, marzo 09, 2007 4:41:00 PM